Vitamina A
La vitamina A, retinol o antixeroftálmica, es una vitamina liposoluble (es decir que es soluble en cuerpos grasos, aceites y que no se puede liberar en la orina como normalmente lo hacen las vitaminas hidrosolubles) que interviene en la formación y mantenimiento de las células epiteliales, en el crecimiento óseo, el desarrollo, protección y regulación de la piel y de las mucosas.
La vitamina A es un nutriente esencial para el ser humano. Se conoce también como retinol, ya que genera pigmentos necesarios para el funcionamiento de la retina. Desempeña un papel importante en el desarrollo de una buena visión, especialmente ante la luz tenue. También se puede requerir para la reproducción y la lactancia.
El β-caroteno, que tiene propiedades antioxidantes que ayudan a eliminar radicales libres previniendo el envejecimiento celular, es un precursor de la vitamina A. Se forma a partir de la provitamina betacaroteno y otras provitaminas en el tracto del intestino grueso.Se almacena en el hígado.
Historia
En el antiguo Egipto se conocía bien la ceguera nocturna, así como otros trastornos oculares, que eran tratados con hígado, mediante aplicación tópica de extracto obtenido exprimiendo el hígado o bien mediante la prescripción de hígado, rico en vitamina A, en la dieta. Pero esta sabiduría de Oriente se perdió, e incluso en el siglo XIX la ceguera nocturna constituyó una plaga para todos los ejércitos del mundo.
En 1913, los investigadores Elmer Verner McCollum y Davis reconocieron la vitamina A como la primera vitamina liposoluble. Ellos realizaron un experimento con ratas concluyendo que estas no podían desarrollarse de forma normal con una dieta purificada de proteínas, grasas, minerales e hidratos de carbono, a menos que se les añadiese extractos de hígado de bacalao o de yema de huevo sustancias que contenían un factor que hasta el momento era desconocido y que era indispensable para el desarrollo y crecimiento normal de estas ratas, así que le llamó liposoluble A más adelante nombrado vitamina A.
Y en 1930, Karrer identifica la estructura química del β-caroteno y de la vitamina A. La vitamina A engloba una serie de compuestos con actividad biológica denominados retinoides. El cuerpo humano presenta tres formas activas de retinoides: retinol, retinal y ácido retinoico, de las cuales el retinol la forma más activa. Algunos pigmentos vegetales, como los carotenoides, generan retinoides al metabolizarse. A estos carotenoides que producen retinol se les denomina provitaminas A. El más activo de éstos es el β-caroteno,
un dímero del retinol. El licopeno y la luteína son otros carotenoides muy importantes como antioxidantes
que se encuentran comúnmente en alimentos, pero que no se pueden transformar en vitamina A.
EFECTO EN EL ORGANISMO
La absorción de vitámeros y provitaminas A requiere una digestión inicial. Los alimentos de origen animal presentan la vitamina A en forma de ésteres de retinilo que se hidroliza en el intestino delgado a retinol, el cual se absorbe con mayor eficacia que los ésteres.
Los carotenoides presentes en los alimentos de origen vegetal liberan retinol en el intestino e hígado. La biodisponibilidad de los carotenoides depende de la eficacia de absorción y de generación de retinol. Se ha estimado una eficacia de absorción del 80 al 95% en los ésteres de retinilo ingeridos,y del 40-60% para el β-caroteno ingerido. La oxidación del retinol a retinal es reversible, pero no lo son las posteriores oxidaciones, como la del retinal a ácido retinoico, que es irreversible.
Entre el 50-80% de la vitamina A en el organismo se almacena en el hígado, donde se encuentra unida a la proteína fijadora de retinol celular. La vitamina A puede movilizarse desde el hígado para distribuirse a los tejidos periféricos. En individuos sanos el retinol del plasma se mantiene dentro de un intervalo estrecho de 40-50 μg/dl en adultos y de casi la mitad en lactantes.
Acción fisiológica y Bioquímica
La vitamina A en la visión: el retinal es un componente de los pigmentos visuales, de los bastones y los conos de la retina, y como tal es esencial para la fotorrecepción. En la retina sólo se encuentra una milésima parte de la vitamina A del organismo. La vitamina A tiene varias funciones importantes en el organismo como la resistencia a infecciones, la producción de anticuerpos, crecimiento óseo, fertilidad. Pero su principal función es la que cumple en la retina. El retinol es transportado hacia la retina, donde es oxidado a 11 cis-retinal que es llevado a las células presentes en la retina, en este caso a los bastones que se une a una proteína de la retinal llamada opsina para así formar el pigmento visual llamado rodopsina, estos bastones junto con la rodopsina detectan cantidades muy pequeñas de luz (por eso su función tan importante para la vista nocturna), estos fotones de luz desatan una cadena de eventos generando un impulso al nervio óptico que el cerebro interpreta tan bien que se permite la visión a blanco y negro.
La vitamina A en la síntesis de proteínas y la diferenciación celular: las superficies del organismo están recubiertas (interior y exteriormente) de células epiteliales. La vitamina A ayuda a mantener la integridad de éstas, promoviendo su diferenciación; asimismo, en la síntesis y secreción de moco, las protege de infecciones por microorganismos o de las secreciones gástricas. Esta vitamina también es muy necesaria para el crecimiento y la diferenciación del tejido epitelial por ejemplo el del ojo, del aparato respiratorio y gastrointestinal, se requiere en el crecimiento del hueso, en la reproducción y el desarrollo embrionario. Junto con algunos carotenoides, la vitamina A aumenta la función inmunitaria, contribuye a reducir las consecuencias de ciertas enfermedades infecciosas que pueden ser mortales.
La vitamina A en la reproducción y crecimiento: el retinol participa en el desarrollo del esperma en el hombre, y en la mujer contribuye al desarrollo fetal durante el embarazo.
El β-caroteno como antioxidante: los carotenoides, además de ser una fuente de vitamina A, pueden actuar por sí mismos como antioxidantes. Esta función, aunque ha sido probada in vitro, actualmente es motivo de estudio en humanos. El β-caroteno que no es transformado en vitamina A protege el organismo de radicales libres, actúa como antirradicalario y como anticancerígeno.
Existen receptores en el núcleo del ácido retinóico y otros retinoides y estos receptores son del mismo tipo que los que median la acción de las hormonas esteroideas y tiroideas.
La cantidad de Vitamina A recomendada es de 1000µg de (ER) por día para los hombres y 800 µg (ER) por día para las mujeres.
En la siguiente lista de alimentos, cada uno contiene al menos 0,15 mg de retinol (lo que es equivalente a 150 microgramos (µg) o 500 UI) de vitamina A o betacaroteno por 50 o 200 g del alimento aprox.: Zanahorias (835 µg 93%). Brócoli (800 µg 89%). Papas dulces (camote), o batatas (709 µg 79%). Col rizada (681 µg 76%). Mantequilla (684 µg 76%). Espinaca (469 µg 52%). Calabaza (369 µg 41%). Lechuga verde (333 µg 37.5%). Melón (169 µg 19%). Melocotones (96 µg 11 %). Papaya, lechosa (55 µg 6%). Mango (38 µg 4%). Guisantes (38 µg 4%). La vitamina A proviene de fuentes animales como la leche, el queso y la crema, sin embargo, todas estas fuentes, tienen un alto contenido de grasa saturada y colesterol.
'Las fuentes de' betacaroteno son la zanahoria, la calabaza, la batata o camote, el melón, el calabacín, el pomelo o toronja, el albaricoque o albérchigo, el brécol o brócoli, la espinaca, en frutas y verduras de color; cuanto más intenso es el color de la fruta u hortaliza, mayor es el contenido de betacaroteno. Estas fuentes vegetales de betacaroteno no contienen grasa ni colesterol.
El tipo más común de provitamina A es el betacaroteno. La vitamina A también está disponible en suplementos dietéticos, generalmente en forma de acetato de retinilo o palmitato de retinilo (vitamina A preformada), betacaroteno (provitamina A) o una combinación de vitamina A preformada y provitamina A.
Déficit de Vitamina A
El estado carencial de vitamina A depende de sus depósitos en el hígado. Cuando una persona adulta y sana deja de tomar alimentos ricos en vitamina A, los síntomas de deficiencia no aparecerán hasta que los depósitos se agoten, lo cual puede tardar entre uno y dos años; en niños en fase de crecimiento este periodo es más limitado.
La deficiencia de vitamina A es uno de los mayores problemas del mundo subdesarrollado. Más de 100 millones de niños en el mundo presentan algún síntoma de deficiencia, lo cual aumenta su vulnerabilidad frente a las infecciones, la ceguera nocturna o total (xeroftalmia) y la queratinización, y puede provocar incluso la muerte. Sin vitamina A, las células del estómago y el intestino disminuyen en número y actividad, de modo que secretan una cantidad menor de moco y dan lugar a una acumulación de queratina en los tejidos.
Dentro de las primeras manifestaciones que ocasiona el déficit de vitamina A (Avitaminosis), se encuentran los problemas de la vista, y más concretamente en la visión nocturna. Un déficit prolongado genera una serie de cambios radicales a nivel ocular, entre ellos la xeroftalmia. El proceso ocurre de forma progresiva. Primero se produce sequedad en la conjuntiva (xerosis) y el epitelio normal del conducto lagrimal y de la mucosa es reemplazado por un epitelio queratinizado. Luego, ocurre una acumulación de la queratina en placas pequeñas (manchas de Bitot) y finalmente se produce una erosión de la superficie rugosa de la córnea, con ablandamiento y destrucción de la misma (queratomalacia), lo cual desemboca en una ceguera total. Otros cambios incluyen el incremento de la susceptibilidad a las infecciones bacterianas, parasitarias o virales, hipoqueratosis, queratosis pilaris y metaplasia escamosa del epitelio que cubre vías respiratorias, urinarias hasta llegar a un epitelio queratinizado, la piel se vuelve áspera, seca, con escamas al igual que el cabello y las uñas. Produce deshidratación del globo ocular y se reseca la piel ,ardor en la visión.
Exceso de vitamina A
Debido a que la vitamina A es liposoluble y no se excreta con facilidad, es posible llegar a consumir un exceso a través de la dieta, a diferencia de las vitaminas hidrosolubles, como las del complejo B o la vitamina C. Algunos de sus efectos tóxicos son la aparición de náuseas, ictericia, irritabilidad, anorexia, la cual no debe ser confundida con anorexia nerviosa (trastorno alimentario), vómitos, visión borrosa, dolor de cabeza, dolor y debilidad muscular y abdominal, somnolencia y estados de alteración mental.
La toxicidad aguda ocurre generalmente con dosis de 25000 UI/kg, mientras que la toxicidad crónica, ocurre con 4000 UI/kg diarias por 6 -15 meses. Sin embargo, la toxicidad hepática puede ocurrir a niveles más bajos, con 15000 UI diarias. En individuos con fallo renal, 4000 UI pueden causar daños importantes. Además de ésto, un consumo excesivo de alcohol puede incrementar esta toxicidad.
En casos crónicos, se evidencia fiebre, insomnio, enrojecimiento de la piel, pérdida de pelo, hemorragias, anomalías de los huesos, fracturas, fallo hepático, muerte.vomito, fatiga, pérdida de peso, fracturas óseas, anemia, diarrea y muerte. Los síntomas aparecen cuando la proteína transportadora de vitamina A se encuentra saturada y la vitamina A en forma libre daña las células. La toxicidad de esta vitamina se asocia a una sobreestimulación de la división celular.
Es importante destacar que los cuadros tóxicos sólo se producen con el uso de la vitamina A pre-formada (retinoide) (como la proveniente del hígado), mientras que la ingesta excesiva de β-caroteno no provoca toxicidad por hipervitaminosis, pero sí puede acumularse en los depósitos de grasa de la piel, desarrollando un color amarillo característico, el cual, sin embargo, no es peligroso y no generan tales síntomas.
Estos síntomas son raros cuando la cantidad de vitamina A es proporcionada por una dieta, pero pueden desarrollarse cuando la persona ingiere una gran cantidad, por ejemplo con suplementos. Los niños son más sensibles a la toxicidad, pues necesitan menos cantidad.
La vitamina A es teratogénica causante de desarrollo fetal anormal y de defectos de nacimiento a dosis superiores a las 10000 UI (1UI equivale a 0,3 μg de vitamina A). Las ingestas anteriores a las siete semanas de gestación son las más peligrosas, por esta razón no se dan suplementos de esta vitamina en el primer trimestre de embarazo. Unas dosis masivas de vitamina A no tienen un efecto correctivo sobre el acné y pueden causar toxicidad. Aplicada tópicamente puede producir irritación de la piel (enrojecimiento) y tendencia a la escamación.
Funciones de la vitamina A
- La vitamina A ayuda a la formación y mantenimiento de dientes sanos y tejidos blandos y óseos, de las membranas mucosas y de la piel.
- Es necesaria para el crecimiento y desarrollo de los huesos.
- Es un nutriente esencial para el ser humano.
- Se conoce también como retinol, ya que genera pigmentos necesarios para el funcionamiento de la retina; o también como un ácido (ácido retinoico).
- Desempeña un papel importante en el desarrollo de una buena visión, especialmente ante la luz tenue.
- También se puede requerir para la reproducción y la lactancia.
- Ayuda a formar tejidos nerviosos.
- Evita afecciones del aparato respiratorio.
- Promueve el crecimiento en la infancia.
- Evita el envejecimiento prematuro.
IMPORTANTE: La información aquí representada es de carácter informativo y no pretende ofrecer una consulta o recomendación médica. No reemplaza la opinión del médico o especialista. Consulte a su médico o especialista. Consulte a su médico antes de iniciar cualquier tratamiento y/o programa físico.
DRA SANDRA MILENA GALVIS CARVAJAL
MEDICO CIRUJANO, UIS
MEDICO AYURVEDA-AYULINK, GUJARAT-INDIA
ESP. MED. ALTERNATIVA Y FARMACOLOGIA VEGETAL, JUAN N CORPAS
ASP. MAESTRIA NUTRICION Y ALIMENTACION, U. BARCELONA-ESPAÑA
DIPLOMADO TERAPIAS ALTERNATIVAS, JUAN N CORPAS
DIPLOMADO HOMOTOXICOLOGIA, U. EL BOSQUE
PRESIDENTE ASOCIACION MEDICOS ALTERNATIVOS, AMIT (2012-2013)
CRA 1 A No. 11-130 TORRE 1 CONSULTORIO 102 OFICHIA
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